miércoles, 3 de abril de 2013

Etéreo Picnic

¿Qué es un festival de música? ¿Cuál es el sentido de la vida? ¿Por qué hacer un festival de música si la vida no tiene sentido? ¿Se puede hacer un concierto y un picnic al mismo tiempo? ¿Es suficiente con ponerse los manteles de cuadritos como si fueran camisas? Como un famoso filósofo dijo en su cuenta de Facebook que la vida sin música sería un error, los integrantes de La Bobada Literaria –que como buenos periodistas culturales no sabemos nada de nada pero copiamos y pegamos lo que encontramos en Wikipedia– quisimos enmendar ese error para darles gusto a los filósofos de Chapinero con un festival que los invite a hacerse preguntas para resolver como más les gusta: con ácido lisérgico y con la mano en la barbilla. Algunos dirán que este evento apunta a las cosas fundamentales; otros, menos fundamentalistas, dirán que su función es permitir a los asistentes ejercer el derecho fundamental a lucir las gafas que, junto con los pantalones encogidos en secadora y los bigotes de Gato con Botas, los acreditan como intelectuales de Twitter y eruditos de Google. Nosotros simplemente no entendemos nada pero queremos parecer interesantes. Aquí está el cartel de Etéreo Picnic 2013, para que juzguen ustedes:

Florence Thomas and the Machine
¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? En ese caso, nos dice la líder de esta banda, hay que luchar por los derechos de los carneros eléctricos, que son discriminados en los sueños de los androides. Pero ¿tienen sexo los androides? ¿Hay distinciones de género entre las máquinas? Señalando evidentes elementos fálicos en las tecnologías de telefonía celular y en las formas de interactuar con las máquinas –usando dos dedos–, las letras de Florence Thomas –publicadas en el diario El Tiempo es Circular– despiertan una nueva conciencia sobre nuestro uso de los aparatos (guiño, guiño) y le dan un nuevo sentido a la tecnología touch.

Primus Numbers
Animals Should Not Try to Act Like People, lanzado en 2003, causó controversia entre los ambientalistas, quienes preguntaron a este grupo de música matemáticamente calculada cómo pretenden, entonces, que se comporten los animales. Así nació una discusión mundial sobre los derechos de los músicos a exigir que les sirvan carnes en los camerinos. No fue la primera vez que este trío fue polémico: quince años antes, Suckrates revolucionó el mundo de la música al ser el primer disco que se negó a ser grabado, con la excusa de que los miembros de la banda sólo sabían que no sabían cómo hacerlo. Por suerte para ellos, tienen una base de seguidores que se ha encargado de grabar cada uno de los discursos que suelen dar en sus presentaciones; en Bogotá se espera que cuestionen el significado de hacer conciertos en un parque existiendo un estadio que, con la calidad de nuestro fútbol, está siendo evidentemente subutilizado.

Books on the TV
Provenientes de Alejandría y la antigua Pérgamo, los miembros de Books on the TV hacen música completamente computarizada para demostrar que, cuando se trata de arte, el formato es lo de menos. El grupo se dio a conocer con OK Abacus, un álbum que mezcla enunciados falsetos con letras en latín tomadas de Séneca y que lo consolidó como uno de los proyectos más profundos del rock neoalternativo nihilista con el introspectivo y silencioso Return to Hermit Mountain. Con planteamientos fuertes y nociones complejas, esta banda cuestionará las más sólidas creencias de los asistentes al festival y los invitará a la contemplación con clásicos del año pasado como "Staring at the Sun".

The God Killers
Esta banda visitó el país durante la gira de su tercer álbum, Gay & Science, que afianzó su fama en las peluquerías locales gracias a sencillos como “Human, all too human” (de la que se desprenden versos kantianos como “Are we human or are we dancers?”) y una elaborada interpretación del superhombre titulada “Spaceman”. Ahora, la agrupación formada en la ciudad de la filosofía del azar y el destino, Las Vegas, viene a presentar su nuevo disco, Tragedy Born, en el que reinterpreta el teatro clásico de Grecia con luces de neón, vestidos de plumas y los únicos dos acordes de guitarra que se sabe. Sus críticos señalan que el nombre de la banda es tal vez el más acertado de todos los del cartel: Dios habrá preferido morir después de oír sus canciones.

The Rolling Stones of Sisyphus
Formada en el existencialismo inglés, esta banda empezó por plantear que el suicidio es el único problema filosófico realmente serio y terminó por hacer cualquier cosa: sus miembros nunca fueron serios y, desgraciadamente, continuaron viviendo. Las canciones se caracterizan por letras absurdas y solos interminables que les valieron el nombre con el que se les conoce en todo el mundo, pues el nombre original de la banda es The Strangers. Son los más veteranos entre los invitados al festival, aunque sus críticos señalan que disco tras disco, canción tras canción, simplemente vuelven a empezar lo que venían haciendo antes.

Discourse on the Method Man
Uno de los miembros de Wu-Tang Kant, bajo el alias de Discourse on the Method Man, ha participado en varios proyectos con otros raperos al tiempo que duda de todos ellos. Sus discos reflejan estos cuestionamientos y, sobre todo, ponen en entredicho su talento (aunque siga siendo convocado a conciertos gracias a la fama que adquirió cuando acuñó la famosa frase “pienso, luego rapeo”). Las letras de sus canciones han sido descritas como geométricas, matemáticas y en muchas ocasiones como planas, y es famoso por recurrir a números en los títulos de sus álbumes y a expresiones como X, Y o Z cuando no sabe cómo terminar una frase. Sin duda, es uno de los invitados más X.
    
Los Amigos Invisibles
Si una banda se sube a una tarima en mitad de un festival y nadie puede verla, ¿esa banda existe? ¿Vale la pena pagar la boleta para verla? Si no puedes verlos, ¿es lo mismo oír tocar a los amigos invisibles que escuchar un disco? Si tus amigos son invisibles, ¿es porque en realidad no tienes amigos? Las preguntas que plantea esta banda son tan profundas como esta edición del festival. Y, de verdad, lo mejor es no verla.

15 comentarios:

  1. no entendi esta entrada
    me voy a meter un trip y vuelvo

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  2. se les olvidó aclarar que la boleta vale $200000 para ir a embarrarse y que cobran hasta por entrar al baño, eso sí es etéreo!

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  3. No vaya y punto. Paren de sufrir!!

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  4. excelente programación, muy profunda *se come un papelito y se pone la mano en la barbilla*

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  5. Ja! y donde me dejaron al Frank Zappa colombiano y pobre, el calvo pendejo que hizo la ametralladora guitarra y que hace música masajeandose las nalgas y otras cosas igual de estupidas, ese man debe ser el cabeza de cartel de ese festival

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  6. Pilas no vaya a ser que luego aparezcan en "ola ke ase ( kien o ke) diciendo que las invitaron, que ni modo, que iba una banda muy chimbita. Les mando un pico y lo mejor son los amigos invisibles!!! jaja

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  7. Este articulo si que dio pereza leerlo.

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  8. ¿Y new order? ¿esa si es buena?

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  9. Los pseudo-locutores y cuasi-disk jockeys de la «x» se han vuelto inmamables con este evento («la vida sin música sería un error... pero con los locutores de la «x» ya es de por sí un desastre radial).

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  10. Leer esto fue casi tan jarto como leer a Fernando Araújo Vélez. De tanto burlarse de Martín de Francisco y de Carolina Sanín ya empiezan a sonar como ellos.

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  11. Esta entrada tan sosa deberían corregirla y darle un buen "Bobadazo" a los locutores de la emisorita de quinta que promocionaban el evento.
    Menos mal me regalaron la boleta porque como raro el sonido estuvo pésimo, la embarrada de rigor en ese lodazal, cobrando hasta por tirarse un pedo.
    Los de TuBoleta siguen robando de lo lindo!

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  12. Después de los videos de NacoArrieta, esta entrada es mas sosa. Mala

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